[2] Una anécdota confiere el origen del nombre de esta bebida a Andrés Bello (1781-1865).
Ya residenciado en Santiago, el humanista solía frecuentar la Confitería Torres (fundada en 1879), donde preparaban este cóctel, cuyos ingredientes eran un vino añejo de la región, pisco, licor de crema, cacao y canela.
Por tales razones, este trago se convirtió rápidamente en su favorito, y para pedir reposiciones del mismo recurre a una expresión cercana a la siguiente: «Mesonero, ¡tráigame usted otra vaina de ésas!».
Bello solía ser tan frecuente y enfático que esta bebida recibió dicho nombre por asociación de ideas.
También hay recetas que recomiendan usar jerez u oporto para el vino dulce.