En el siglo XVIII, Pedro el Grande estableció una base para el ejército y la armada rusa en Vólogda.
Sin embargo, con el auge de San Petersburgo, Vólogda perdió importancia comercial.
Desde la segunda mitad del siglo XIX, Vólogda se convirtió en una ciudad para exiliados políticos como I. Stalin, V. Mólotov, M. Ulyánova (hermana de Lenin), N. Berdiáyev (filósofo famoso), B. Sávinkov (terrorista famoso) y otros.
Actualmente Vólogda es un centro administrativo, industrial y cultural, con una población de aproximadamente 300 000 habitantes.
Hay 224 monumentos históricos, arquitectónicos y culturales, de los cuales, 128 están protegidos por el Estado.