En la mitología hinduista, este dios representa al Sol en su triple aspecto de deidad bienhechora que alumbra, vivifica y alimenta.
Algo muy común en los Vedas y en otras escrituras sagradas hinduistas, es poner a los dioses diferentes nombres, según la actividad, faceta o circunstancia en la que se hallen.
Se considera que estos nombres encapsulan los aspectos esenciales y las cualidades divinas del Sol.
Por ello, se transformaron en una tríada hinduista que fue muy popular y venerada en la Edad védica.
Las características y atributos de estas tres deidades son muy parecidos, aunque con matices diferentes.
Aunque otras deidades tienen ahora más predominancia, el culto a Suria todavía queda patente.
El culto a Suria que todavía se practica, tiene relación con la curación de enfermedades.