Una mujer descasada, cuyo título original en inglés es An Unmarried Woman, es una película estadounidense de 1978, dirigida por Paul Mazursky, y protagonizada por Jill Clayburgh, Alan Bates y Michael Murphy en los papeles principales.
Erica Benton (Jill Clayburgh), una adinerada mujer de Nueva York, lleva una vida perfecta hasta que su marido, un agente de profesión, Martin Benton (Michael Murphy) la abandona por una mujer más joven.
Erica se enfrenta a su situación de volver a ser soltera, y debe pasar por períodos de confusión, pena y rabia.
A medida que avanza su vida, afianza sus lazos con algunas amistades y se encuentra inspirada, e incluso más feliz por su renovada libertad.
Erica finalmente encuentra el amor con un artista británico (Alan Bates), un hombre rudo, pero a la vez sensible.