El primer asentamiento habría sido levantado por los cananeos unos 3000 a. C. En la antigüedad, allí pasaban las rutas que enlazaban el valle del río Jordán con los puertos mediterráneos, y los romanos construyeron un pueblo llamado Berat Soreqa.
Se asienta en el flanco del primer monte que domina la llanura costera, con una amplia perspectiva ininterrumpida hacia el oeste, y por este motivo el sitio era fácil de defender y atacar a la vez.
Al final de las Cruzadas la zona era poco poblada debido a la inseguridad, pero hasta el periodo de la Tanzimat (reforma administrativa) otomana, a principios del siglo XIX, la zona fue densamente poblada.
Eran granjeros y ganaderos que habían emigrado de Arabia varias generaciones antes.
Bajo el waqf establecido por el sultán Solimán el Magnífico, la población de Tulkarem contaba con 95 hogares, lo que equivalía a unas 522 personas.
En esa época, Tulkarem era el pueblo más poblado del distrito de Nablus.
Como en muchas ciudades palestinas, Tulkarem era gobernada desde la época árabe por una élite de extensos grupos familiares (hamulas) establecidos desde generaciones sobre la base de lazos de sangre o matrimonios, y cuyos derechos sobre las tierras se basaban en la costumbre y no en la ley escrita.
En 1858, Tulkarem se convirtió en un centro administrativo, y en 1868, dado que la madrasa Al-Jawhariyya de Jerusalén había dejado de existir, las tierras del waqf fueron repartidas entre los campesinos locales.
[6] Tulkarem sufrió muchos ataques diversos a lo largo de los siglos, pero el más mortífero ocurrió en la primavera de 1799, cuando fue atacado por el ejército francés al mando del general Kléber, que marchaba sobre Acre evitando la llanura abierta.
La ciudad fue vencida tras ser bombardeada por las tropas francesas con tiros de artillería que ocasionaron numerosas víctimas.
[5] El ferrocarril del Hiyaz, que fue inaugurado en 1908 y unía Medina y Damasco, tenía una estación en Tulkarem, que el ejército otomano utilizó como base militar durante la Primera Guerra Mundial.
[2] Pero con la ocupación, los israelíes empezaron a confiscar tierras para construir nuevos asentamientos para colonos o para fines militares.
Jaber murió y Hussein falleció más tarde en el hospital donde lo trasladaron.
[18] El 22 de abril terminó una redada israelí de 50 horas en el campamento de Nur Shams que causó al menos 14 muertos palestinos, entre supuestos milicianos y civiles, y dejó el barrio sin agua potable, internet ni electricidad, ni acceso a las ambulancias.
Entre el centro ciudad de Tulkarem y los pueblos de Shuweike e Irtah se extiende una llanura agrícola, tradicionalmente dedicada al cultivo de hortalizas, si bien se está convirtiendo en área urbana debido a la presión demográfica.
El municipio está rodeado por el norte, este y sur por una serie de colinas sin urbanizar que ofrecen buenas perspectivas de expansión urbana.
La apicultura era tradicionalmente importante en Tulkarem, y su miel era renombrada por el sabor que le aportaban los naranjos y limoneros; pero buena parte de las plantaciones de cítricos han desaparecido y en el siglo XXI menos de 200 productores permanecen en la región.
Las empresas fueron denunciadas por tirar deshechos contaminantes hacia tierras palestinas, pero las autoridades israelíes explicaron que estaban fuera de su jurisdicción.
De hecho, la legislación laboral de Israel no es aplicada a los trabajadores palestinos de las empresas israelíes del complejo industrial, que cobran un tercio del salario estipulado, ni tienen derecho a bajas por enfermedad ni a vacaciones.