Para poder optar al trofeo los guardametas deberán haber disputado veintiocho partidos, o más, durante el campeonato de Liga.
La clasificación del Trofeo Zamora se establece, una vez finalizada la temporada, según el cociente obtenido al dividir el total de goles recibidos por cada guardameta, por el número de partidos disputados encuentros que se le computaron.
Dicho cociente se obtiene hasta la fracción centesimal, clasificándose en primera posición el poseedor del promedio numéricamente inferior, y sucesivamente, en orden creciente.
Por ello, el Trofeo Zamora podría ser ganado por más de un aspirante (cosa que sucedió en la temporada 1992-93).
Es importante destacar que dadas las reglas para la concesión del Trofeo Zamora, no necesariamente lo gana siempre el portero menos goleado (de hecho, en las temporadas 1970-71 y 1972-73 el diario Marca decidió entregar dos trofeos: uno al mejor coeficiente conforme a las reglas del premio y otro al portero menos goleado).