El triple-sec aparece como un producto derivado del curaçao en Francia en el siglo XIX.
El primero habría sido Jean-Baptiste Combier,[1][2] quien se instaló en Saumur, en el valle del Loira, en 1834 y creó en 1848 el Elixir Raspail basándose en una fórmula del químico François Vincent Raspail en la que sustituyó el alcanfor por un destilado de cáscaras de naranjas.
Tras una denuncia de Raspail, renombró el licor Elixir Combier, el triple seco con el que hizo fortuna.
[3] En el siglo XXI la firma sigue produciendo ese primer triple seco bajo el nombre de L'original Combier, manteniendo la receta original.
Aunque no lleven la denominación en su nombre comercial, son triple secos el Curaçao y el Grand Marnier.