La voz «aicmofobia» y su variante «ecmofobia» proviene del griego antiguo αἰχμή aikhmḗ ‘punta de una lanza’[2] y el sufijo latino científico -phobia, este del griego antiguo -φοβία -phobía ‘fobia, miedo’.
[4] Si bien los tres términos suelen ser usados como sinónimos, principalmente «aicmofobia» y «tripanofobia», hay ciertas diferencias, las cuales serán expuestas a continuación.
La aicmofobia o ecmofobia como se ha mencionado anteriormente es una fobia más generalizada, es decir, la aicmofobia es el miedo a cualquier objeto puntiagudo, sin importar su tamaño, estilo o uso; como los alfileres, agujas, clavos, jeringas, etc.
La belonefobia es una fobia más específica, ésta consiste en el miedo a las agujas, las jeringas y cualquier otro material de uso médico.
La tripanofobia o trepanofobia es al igual que la belonefobia, una fobia más específica, consiste en el miedo a las inyecciones y los piquetes.