Se la ha clasificado como un subtipo de leucemia linfática crónica.
En 1958 se le renombra tricoleucemia por el aspecto "peludo" de las células B malignas que aparecen en esta patología.
Los síntomas de la tricoleucemia incluyen: Los signos de la tricoleucemia incluyen: El diagnóstico diferencial hay que hacerlo con la mieloptisis, la aplasmia medular y, sobre todo con la leucemia prolinfocítica, que también presenta una gran esplenomegalia y pocas adenopatías.
Se trata a aquellos pacientes en los que la sintomatología es muy acusada.
Fauci AS, Braunwald E, Kasper DL, Hauser SL, Harrison's Principles of Internal Medicine, 17º ed.