La sala donde se llevan a cabo los procedimientos judiciales se conoce como sala de audiencias, y el edificio como palacio de justicia; las instalaciones judiciales varían desde instalaciones simples y muy pequeñas en comunidades rurales hasta instalaciones grandes y complejas en comunidades urbanas.
Según los Comentarios sobre las leyes de Inglaterra de William Blackstone, un tribunal (para los agravios civiles) está constituido por un mínimo de tres partes: el actor o demandante, que se queja de un daño causado; el reus o demandado, que está llamado a dar satisfacción por ello; y el jūdex o poder judicial, que debe examinar la verdad del hecho, determinar la ley que surge de ese hecho y, si parece que se ha causado algún daño, determinar y aplicar un remedio legal por medio de sus funcionarios.
También es habitual en los tribunales superiores contar con abogados, procuradores o consejeros como asistentes,[3] aunque, a menudo, los tribunales están compuestos por abogados, alguaciles, taquígrafos y quizás un jurado adicionales.
Así, en casos de procesos penales en el ámbito militar pueden constituirse como tribunales federales Art.
Sin embargo, el tribunal también puede entenderse como un órgano judicial (p. ej.
La participación de legos como jueces honorarios está prevista en los procesos penales (entonces llamados "Schöffen"), en la jurisdicción mercantil (entonces llamados "Handelsrichter"), así como en la jurisdicción laboral, financiera, social y administrativa.
Son jueces legos en sentido amplio, pero pertenecen a la función pública como grupo especial.
El desarrollo de una vista judicial está normalizado en diversas fuentes jurídicas.