El budismo afirma que tanto nuestra realidad interior como la del mundo externo, están siempre en un estado de cambio permanente.
[2] Según la doctrina budista, igualmente ninguno de nosotros es física, emocional ni mentalmente la misma persona que éramos hace años.
Dukkha (dukkha en pali) puede traducirse como desilusión; insatisfacción; sufrimiento; frustración; incomodidad; sed (o mejor, la molestia causada por la sed); dolor; intranquilidad; imperfección; malestar; fricción; pesar; irritación; presión; ir contra corriente; agonía; vacío; tensión; angustia (existencial)... Dukkha es una palabra pāḷi (lengua muerta india) que proviene del sánscrito duḥkha y se trata de un término de difícil traducción.
[5] En ambos idiomas quiere decir, a grandes rasgos, molestia, sufrimiento, dolor o ansiedad y afines.
Las cuatro nobles verdades del budismo se expresan de acuerdo a este término: