Trávelin

Un buen trávelin pasa generalmente desapercibido al espectador, quien se encuentra inmerso en la acción, pero contribuye considerablemente a amenizar la película desde un punto de vista fotográfico.

A partir de este momento, se empezaron a utilizar varios medios para mover la cámara como por ejemplo: barcos, automóviles, trenes, ascensores, funiculares, cintas de correr, trineos, aerostatos y, más adelante, aviones y drones.

Al utilizar escenarios diferentes nacía el montaje en paralelo, y el público empezó a entender la mezcla de planos.

En el año 1912, Oscar Apfel realizó un filme para Thomas Edison donde aparecían varias retrospectivas, Le Passant.

Apfel optó por mover la cámara adelante y atrás sobre un carro que se acercaba o alejaba al actor cuando tenía las escenas retrospectivas.

Este carro puede ser un soporte con ruedas que solo sostenga la cámara, o puede tener una forma más compleja y estar compuesto por una columna central acompañada de un brazo ajustable y plegable conocido como Spyder, que se encarga de sostener al operador sentado.

Un ejemplo de estas variaciones es la steadicam [5]​[6]​ La cámara que iba sobre la espalda del operador se sustituye por un sistema que permite a la cámara estabilizarse y no percibir el movimiento al tenerla en mano.

Con el travelling mecánico, en cambio, se obtiene una variación de la perspectiva, cosa que con el zum no pasa.

Aun así, el zum permite provocar un efecto muy dinámico de acercamiento repentino conocido como puñetazo.

Rodaje de la película The Alamo .