Tratado de Cuenca

El Tratado de Cuenca[2]​ fue firmado en Cuenca en agosto del año 1177[1]​[2]​ entre Alfonso VIII de Castilla y Alfonso II de Aragón.[1]​ Según los términos del acuerdo, ambos reyes confirmaron lo firmado en el Tratado de Sahagún,[3]​ acordaron ayudarse mutuamente contra todos los cristianos y musulmanes excepto Fernando II de León.[3]​[1]​ Se reconocían mutuamente sus posesiones sin exigirse nada.[3]​