Trastorno disfórico premenstrual

Sin embargo, para saber los síntomas y consecuencias del TDPM es necesario realizar una historia clínica del paciente, así como también una secuencia de exámenes físicos, como, por ejemplo: un examen pélvico y una evaluación psiquiátrica para descartar otros posibles desórdenes.

Diversos estudios han mostrado que las mujeres con TDPM reportan menor satisfacción y menos experiencias positivas con sus parejas en los días previos a la menstruación debido a la forma en la que ven e interpretan las cosas durante esa fase, mientras que los hombres también experimentan menor satisfacción y mayor tristeza durante este ciclo de su pareja.

Sin embargo, casi siempre son más graves y debilitantes en el caso del TDPM.

En el contexto de la investigación, a menudo se aplican límites numéricos estandarizados para verificar el diagnóstico.

[12]​ La dificultad de diagnosticar el TDPM es una de las razones por las que puede resultar difícil para los abogados citar el trastorno como una defensa del delito, en los casos muy poco frecuentes en los que el TDPM está supuestamente asociado a la violencia criminal.

Los síntomas también deben ser lo suficientemente graves como para afectar el trabajo normal, la escuela, las actividades sociales o las relaciones con los demás.

ej., evitar actividades sociales, disminución de la productividad y eficiencia en el trabajo, la escuela o el hogar).

[15]​ La angustia clínicamente significativa no está definida explícitamente por el DSM-IV, donde ha sido criticada por varios académicos por ser demasiado vaga y potencialmente perjudicial para quienes tienen síntomas de depresión, ansiedad u otros trastornos del estado de ánimo, porque no cumplen con los requisitos clínicos.

[15]​ Criterio G: los síntomas no son atribuibles a los efectos fisiológicos de una sustancia (p.

[15]​ El TDPM no se puede diagnosticar con ningún examen físico ni pruebas de laboratorio.

El trastorno disfórico premenstrual se presenta con mayor énfasis que el SPM, puesto que, además de una mayor depresión tanto física como psíquica, los síntomas son más graves; sin embargo, algunos estudios clínicos han señalado que los factores sociales, culturales, biológicos y psíquicos intervienen en la formación tanto del trastorno disfórico premenstrual como del síndrome premenstrual.

[2]​ Una pequeña cantidad de mujeres se ve afectada por el TDPM durante los años en que tiene períodos menstruales.

Existen varios medicamentos que han recibido apoyo empírico para el tratamiento del TDPM.

[11]​[18]​[19]​ La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) ha aprobado cuatro ISRS para el tratamiento del TDPM: fluoxetina (disponible como genérico o como Prozac o Sarafem), sertralina (Zoloft), paroxetina (Paxil) y escitalopram oxalato (Lexapro).

[27]​[28]​[29]​ Los síntomas del TDPM pueden volverse tan intensos que interfieren con la vida diaria de una mujer.

El suicidio en mujeres con depresión es mucho más probable que ocurra durante la segunda mitad de su ciclo menstrual.