Tomo a Flaviano

El Tomo a Flaviano (en latín: Tomus ad Flavianum), también conocido como Tomo de León (Tomus Leonis), es un tratado de cristología que el papa León I el Magno envió al patriarca Flaviano de Constantinopla en el año 449 para responder a la apelación de Eutiques, quien había sido condenado por rechazar la fórmula propuesta inicialmente por Proclo de Constantinopla de las dos naturalezas en Cristo.[1]​ En el tomo se rechaza el monofisismo, desarrollando la doctrina de las dos naturalezas en una persona, siguiendo la doctrina de la comunicación idiomática que se va formulando desde el Concilio de Éfeso: en Cristo se dan las propiedades de lo humano y lo divino, aunque lo humano y lo divino sean distintos.De este modo, se afirma que en Cristo se unen la naturaleza humana y la divina sin confusión ni mezcla.Como el emperador Teodosio II apoyaba a Eutiques, convocó a un segundo Concilio de Éfeso, donde se le justificó,[1]​ se ignoró el Tomo de León con desprecio y se proscribió toda mención a las dos naturalezas.[3]​ El papa León por su parte desaprobó dicho concilio llamándolo «latrocinio» y tras la muerte de Teodosio se convocó al Concilio de Calcedonia,[1]​ que adoptó el Tomo como ortodoxia, elaborando una minuciosa definición cristológica que recogió la doctrina de las dos naturalezas de Cristo.
Tomo a Flaviano de León Magno en griego y latín (impresión de Nicolaus Glaser, 1614).