Tomás Ripoll (Tarragona, 1653-Roma, 1747), religioso dominico, fue maestro general de la orden de 1725 a 1747.
En su convento de Santa Catalina de Barcelona, del que había sido maestro de teología y prior en 1699 y que, ya siendo maestro general, contribuyó a reparar tras los daños sufridos en la guerra de sucesión,[7] promoviendo la creación e instalación en él de una biblioteca pública,[8] se celebraron el 18 de diciembre solemnes exequias de las que hay noticia detallada en la Breve y descriptiva relación de las solemnes exequias, que la religiosa comunidad del convento de Santa Cathalina virgen, y mártyr de Barcelona, consagró a la venerable memoria del mas Ilustre Hijo, y amado Padre el Reverendissimo Fr.
Con la oración fúnebre, y Panegyrica, que dixo el M. R. P. M. fr.
Juan Lleonart, Prior actual del mismo Convento, en Barcelona, por Juan Jolis, 1748.
Incluye una lámina plegada con la imagen del túmulo, una máquina de más de ocho metros de base y dieciséis de altura, grabada por el dominico mallorquín Albert Burguny por dibujo de Manel Vinyals.