Tinamidae

[5]​ El grupo incluye cuarenta y siete especies que se distribuyen desde América del Sur hasta América del Norte, desde Patagonia hasta México, ocupando una amplia gama de hábitats.[6]​ Son activos durante el día y se retiran a dormir por la noche.Las hembras deambulan por varios territorios apareándose y poniendo huevos en los nidos de los machos residentes.También han sido muy cazadas por el hombre y a veces perseguidas como plagas agrícolas.Sin embargo, la principal amenaza para sus poblaciones es la destrucción del hábitat por la roturación de tierras y el desarrollo agrícola.Si bien pueden volar, normalmente se comportan como aves corredoras, aunque no alcanzan cierta velocidad para escapar de sus depredadores.Por ello suelen levantar pequeños y torpes vuelos, lo suficientemente efectivos para permitirles huir.La parte posterior del tarso está cubierta de escamas, cuyo color puede ayudar a su identificación.La hembra tiene un pequeño órgano fálico en la cloaca que se agranda durante la época de reproducción.El siguiente cladograma, basado en Bertelli & Porzecanski (2004),[13]​ muestra las relaciones entre los distintos linajes de tinamúes: Tinamotis Eudromia Rhynchotus Nothoprocta Nothura Taoniscus Nothocercus Tinamus Crypturellus El tinamú abigarrado tiene una proporción de sexos asimétrica, con más hembras que machos.[8]​ La época de reproducción varía de una especie a otra; las que viven en bosques tropicales, donde hay pocos cambios estacionales, pueden reproducirse en cualquier momento, aunque suele haber un periodo preferido.El tinamú de las tierras altas es único, ya que sitúa su nido en una cavidad o bajo una roca saliente en una ladera escarpada[8].Muchas especies no construyen nido y optan por poner los huevos sobre un fino lecho de hojas.[8]​ Puede haber hasta 16 huevos en una puesta, consecuencia de que varias hembras pongan en el mismo nido.Los colores varían según la especie: verde, púrpura, violeta, turquesa, gris acero, chocolate y amarillo limón.[8]​ Durante este periodo el macho suele permanecer en silencio; si llama, lo hace lejos del nido.Es posible que un observador humano se acerque y toque al macho incubador sin provocar una respuesta manifiesta.En general, se cree que los tinamous no son tan eficaces como otras aves en sus exhibiciones de distracción.[8]​ Las crías son precoces y pueden correr casi tan pronto como nacen.[9]​ Los pollos jóvenes pueden alimentarse solos en los primeros días, pero el macho les traerá la comida y la dejará caer al suelo delante de ellos.La madurez sexual llega al año de edad, aunque algunas especies pueden ser fisiológicamente maduras a los 57 días.
Vista ventral del cráneo de un tinamú de alas rojas
Polluelos de tinamú ondulado en cautividad.