Tigre Hotel

Tenía paneles tallados, grandes espejos embutidos y salones con suntuosa decoración.Las habitaciones del hotel estaban bien orientadas y había una terraza al frente, a la que se accedía mediante una escalinata de mármol.Posteriormente se construyó un patio andaluz y luego un hermoso jardín de invierno.En 1916, el edificio fue renovado completamente, acorde a los gustos de la elite económica de los años del Centenario, y en sus salones ocurrieron fiestas y bailes adonde se reunía la aristocracia porteña, en su mejor época gracias al éxito del modelo agroexportador.Ya en 1934, el público prefería Mar del Plata, que para esa época se había convertido en una esplendorosa ciudad balnearia.