Tierra prometida

La tierra prometida o tierra de promisión [1]​ es un nombre que corresponde al relato de la Biblia, en el cual Dios promete entregar unos terrenos como herencia a sus fieles, empezando por Abraham, y luego a sus descendientes.

Según Génesis 15:18 equivale a la porción situada entre la costa de Egipto hasta la orilla del Éufrates.

[4]​ La Real Academia Española define el término en minúscula, si bien cuando se trata del nombre propio es adecuado también el uso de la mayúscula (Tierra Prometida).

A partir del concepto bíblico, se suele usar como préstamo también para otras expresiones («En ese momento, la isla era tierra de promisión para los navegantes»; «Este sitio dista de ser la tierra prometida que nos han dicho», etc.).

Es con el primer patriarca del pueblo hebreo que Dios establece su Alianza o Pacto, también conocido como Convenio Abrahámico: El libro del Éxodo contiene los siguientes términos: La tierra que Dios prometió a Abraham figura en el texto bíblico: Alcances máximos: Alcances mínimos: Los recursos de dicho terreno se describen en Deuteronomio de la siguiente manera:

Interpretación del terreno prometido a Abraham según Génesis 15.
Estampilla israelí con Josué y Caleb portando el fruto de la Tierra Prometida. En hebreo, presenta la inscripción «Tierra de leche y miel» (Números 14:8).