Favus
Afecta sobre todo al cuero cabelludo, por lo que se considera una variedad de tiña capitis (es su forma más grave).La enfermedad, si no recibe tratamiento, se hace crónica, pudiendo persistir toda la vida en el individuo afectado, provocando pérdida de cabello de carácter permanente y no recuperable (alopecia cicatricial).Actualmente el favus es poco frecuente en Europa y Estados Unidos, pero sigue existiendo en determinadas zonas de África, Oriente medio e India.En el año 1839, Johann Lukas Schönlein descubrió que el favus estaba causado por una infección de la piel debida a hongos.Robert Remak en 1842 logró cultivar el agente infeccioso en rebanadas de manzana y lo nombró como Achorion schöenleinii en homenaje a Johann Lucas Schönlein.