Elissa los sorprende y se inflama de celos por ver que su amor ya no es correspondido por Pánfilo.
Cupido huye de su presencia y Venus le recrimina sus sentimientos.
Todos se dan cuenta de que sus respectivas actitudes han delatado sus verdaderas emociones y requeridos por Dioneo, intentan continuar con la representación.
Tras una breve discusión sobre la conveniencia de dejar entrar a un extraño, abren el portón y permiten que entre un monje.
Al terminar su monólogo les propone actuar todos juntos el auto de María Magdalena.
El monje les dice a los intrusos que la salvación está dentro de ese recinto y amonesta a los cuatro personajes principales por su orgullo de recluirse intentando no compartir el paraíso de la salvación que representa aquel recinto vedado a la epidemia del cual han sido ahora expulsados.
Entra Belissa conduciendo a Lauretta, que se recupera lentamente de la enfermedad.
Inesperadamente regresa Pánfilo que narra los horrores vistos en la ciudad y les reprocha vivir en esa casa sin tener conocimiento de la muerte.
Lauretta los interrumpe diciéndoles que debe terminar de interpretar su papel.
El médico les pide que representen una obra para los otros enfermos.
Dioneo asume el papel del Prólogo que narra la historia de Cupido y Psique interrumpida en el primer acto, mientras los personajes representan los hechos e intervienen en su relato.
El Prólogo explica que Venus mandó a Psique al reino de la muerte a buscar la fuente de Perséfone para lograr su parcial redención del amor.
Ahí debe buscar un cofre y llevárselo a Venus sin abrirlo.
Cupido, recuperado, se precipita a ayudarla, pero ella no despierte.
La diosa concede su perdón y le ordena besarla en los ojos para que ella despierte renovada del olvido.
Cupido cumple la orden y le ofrece a Psique un fruto del árbol de la inmortalidad.
En esa ocasión se presentó la ópera con el título Pánfilo and Lauretta.
A partir de ese momento, Carlos Chávez comenzó a revisar la partitura y preparó una segunda versión con base en una traducción poco afortunada del libreto al castellano.
Esta segunda versión se volvió a presentar en México, pero con el título en castellano Los visitantes.