The X Factor (álbum)
The X Factor despertó opiniones divergentes entre los fanáticos básicamente por el cambio de vocalista, sin embargo con los años es cada vez más apreciado, básicamente por la potencia y profundidad de gran parte de sus canciones y las nuevas variantes compositivas que explora, por ejemplo, la estructura "introducción acústica - parte principal de la canción - outro acústica" que, ya con Dickinson de vuelta, el grupo seguiría explorando (lo que se aprecia particularmente en los seis últimos trabajos de la banda: Brave New World, Dance of Death, A Matter of Life and Death, The Final Frontier, The Book of Souls y Senjutsu).(En la que expresa el gusto de vivir en peligro, mezclando la furia y la emoción.El álbum también cuenta con temas tan complejos como "Fortunes of War" o "Blood on the World's Hands".El arte del disco mantiene el tono oscuro de sus canciones, con un Eddie sentado en una silla de tortura, en la portada, mientras en la contraportada la máquina parece haberse puesto en marcha, con un desagradable resultado para nuestro pobre Eddie.Para Steve Harris, líder y bajista de la banda, The X Factor es uno de sus tres discos favoritos junto a Piece of Mind y Seventh Son of a Seventh Son.