Es una sentida función romántica en la vertiente folk de DM, apenas puesta en práctica en este álbum junto con el tema Freestate, con letra abundante, una musicalización más acentuada en lo acústico, así como la intencional casi sistémica y evidente relegación de los elementos electrónicos, y una duración prolongada.
Además, la canción está en parte de la letra dirigida a una segunda persona, ¿una mujer?, quizás un lamento a aquella relación perdida o nunca correspondida que se volverá un dolor permanente e inolvidable para quien haya comprometido todo su ser.
Por otro lado, la musicalización comienza con un discreto efecto de reactor contenido para dar paso a unas notas de guitarra que conduce todo el tiempo la melodía principal, así como la batería acústica desde percusiones básicas hasta los tambores con batacazo que integran perfectamente un tema bastante más recargado hacia el lado más orgánico de DM.
También complementa la entrada un efecto seco de suspiro ahogado, con lo cual comienza su discurso tristón sin concesiones.
The Love Thieves no ha sido interpretada en el escenario por DM, sin embargo en 2003 la canción fue interpretada por Martin Gore en solitario durante una presentación de nombre "A Night with Martin L. Gore".