Normalmente los termopares industriales están compuestos por un tubo de acero inoxidable u otro material.Su principal limitación está en la exactitud, pues es fácil obtener errores del sistema cuando se trabaja con precisiones inferiores a un grado Celsius.Todos estos factores tienen un efecto en el rango de temperatura a medir, precisión y fiabilidad en las lecturas.Por otro lado, los termopares tipo B, R y S son los más estables, pero debido a su baja sensibilidad (10 µV/°C aprox.)Los termopares con una baja sensibilidad, como en el caso de los tipos B, R y S, tienen además una resolución menor.A continuación, un breve listado de los problemas más comunes que deben tenerse en cuenta.Se debe tener en cuenta que cualquier contacto entre dos metales distintos creará una unión.Lo más correcto es emplear conectores comerciales del mismo tipo que el termopar para evitar problemas y errores de medición.Para minimizar la desviación térmica y mejorar los tiempos de respuesta, los termopares están integrados con delgados cables.Si se necesitan termopares con delgadas guías o largos cables, conviene mantener las guías cortas y entonces usar el cable de extensión, el cual es más grueso (lo que significa una menor resistencia) ubicado entre el termopar y el instrumento de medición.Estas tensiones pueden ser causados tanto por una recepción inductiva (un problema cuando se mide la temperatura de partes del motor y transformadores) o por las uniones a conexiones terrestres.Un problema similar puede ocurrir si un termopar no está suficientemente inmerso en el líquido, debido a un ambiente de temperatura de aire más frío en los cables, la conducción térmica puede causar que la unión del termopar esté a una temperatura diferente del líquido mismo.
Termopar típico tipo K de bajo costo (con conector estándar tipo K). Si bien los cables pueden sobrevivir y funcionar a altas temperaturas, el aislamiento de plástico comenzará a romperse a 300 °C.