En 1953 publicó su obra cumbre, conocida a la postre como El Quijote de Miciano.
Provenía de una familia acomodada, ya que su abuelo había ejercido como notario en Jerez.
Finalmente, abandonó los estudios de arquitectura, pero completó su formación en Bellas Artes en 1926.
En 1935, se trasladó a Madrid, donde vivió el inicio de la guerra civil.
Durante este tiempo, se unió al Partido Comunista y colaboró activamente en su periódico, Mundo Obrero, además de afiliarse a la UGT.
De este periodo destacan sus portadas en Mundo Obrero y su participación en la obra El Anti-Fondo: Archivo del PCE.
En 1939, Teodoro Nicolás Miciano intentó embarcarse hacia Argentina desde Valencia, donde estaba su familia, pero fue detenido en Alicante al no conseguir pasaje.
Juzgado, recibió una condena de 20 años, aunque en 1942 fue liberado provisionalmente y se trasladó a Barcelona.
Este proyecto, iniciado en 1947 en Jerez con el apoyo financiero de los hermanos Jurado, vinculados al mundo bodeguero, se extendió hasta 1966.