Teodoro Balsamón
Está considerado el más eminente de los canonistas bizantinos,[1] y fue elegido Patriarca de Antioquía en el exilio como Teodoro IV entre 1185 y 1191 por estar su sede ocupada por los Latinos.Realizó sus comentarios a petición del emperador Manuel I y del patriarca Miguel III, pero los dedicó al patriarca Jorge II de Constantinopla (Xifilín) (1191/1198).En 1193 se convirtió en Patriarca de Antioquía, aunque mantuvo su residencia en Constantinopla.Sus obras más importante son los 'escolios' (griego: Σχόλια, Scholia) (c. 1170), un comentario sobre el Nomocanon de Focio, un trabajo sobre un intento de imponer alguna coherencia entre las leyes y decretos imperiales con los eclesiásticos ortodoxos orientales, comisionado por el emperador Manuel I y el patriarca Miguel III.Sus comentarios son todavía referenciados por estudiantes del derecho canónico ortodoxo oriental, y se han publicado en una colección oficial de derecho canónico conocida como el Pedalion (en griego: Πηδάλιον, 'Timón', llamado así porque se entiende como una guía para "gobernar" la Iglesia).