Dividida en dos partes, una baja y otra más alta, en la que se encuentra la así llamada Casa de Yahvé, un lugar considerado sagrado, donde se han venido haciendo ofrendas desde los días de los reyes David y Salomón, hasta tiempos recientes.La ciudad está dividida en dos partes, la zona baja fue habitada durante el calcolítico (4000 a. C.).[2] Se ha hallado restos de un asentamiento cananeo de la Edad del Bronce que estuvo habitado hasta el año 2650 a. C.[3] Estuvo deshabitada durante 1.500 años hasta que en el siglo XI a. C. se establecieron los israelitas.Los persas construyeron varias fortalezas que perduraron hasta la destrucción de Jerusalén por los romanos en el año 70.En este templo se han encontrado evidencias del uso de sustancias alucinógenas en el culto israelita.