La tecnoética es un área interdisciplinar sobre todos los aspectos morales y éticos de la tecnología en la sociedad.
Si tomamos este descubrimiento como base podemos constatar que todo el razonamiento humano e incluso su misma existencia está relacionada y determinada por la tecnología.
Según Sócrates la escritura tendría una influencia negativa ya que solo le daría a los hombres la ilusión de sabiduría.
En este mito, un pastor usa el poder del anillo para ponerse por encima de la sociedad e ignorar las reglas morales impuestas por esta.
Este mito ilustra claramente como una nueva tecnología puede alterar la moral de un individuo e imponerse por sobre las normas impuestas por la sociedad.
Según esta visión la sociedad forma la tecnología de acuerdo a sus necesidades y también le atribuye valores.
El objeto continuará incluso adquiriendo valores una vez sea desechado, si fue reciclado o terminó en un basurero.
Esta travesía recupera valores como la cooperación, la equidad, la explotación, la ambición, la comodidad entre muchos otros que le dan una inherente carga social y política.
La realidad virtual nos permitiría en teoría vivir una vida compuesta solo de placer pero alienando la realidad como consecuencia, lo cual tiene perfecto sentido para el utilitarismo pero nos demuestra que las experiencias de la vida real tienen un valor intrínseco aunque impliquen sufrimiento.
Es difícil considerar el utilitarismo sin también dirigirse a su contraparte sostenida por el filósofo alemán Immanuel Kant.
Podemos empezar por analizar cómo la noción del imperativo categórico se aplica a la tecnología.
Si todos los puentes siguiesen esta misma lógica la ciudad quedaría solo transitable por vehículos, causando problemas sociales masivos.
Con el uso de la tecnología un individuo puede incluso llegar a rivalizar el poder del Leviatán desestabilizando el orden social.
Si bien la tecnología se puede prestar para usos moralmente reprensibles, el filósofo francés Emmanuel Lévinas en su obra "Entre Nosotros" argumenta que el rostro humano es la clave de la empatía con los demás.
Como explica Levinas, es posible ponerle un rostro a problemas que ocurren al otro lado del mundo y aportar ayuda rápidamente.
Con este conocimiento personal tenemos una constante más para poder evaluar el impacto que tendrán las tecnologías en el futuro y evitar problemas.
El internet también ha ayudado a reducir la cantidad de crímenes ya que es fácil seguir a alguien con su uso de internet pero al mismo tiempo el cibercrimen está al alza y en una escala en la que los organismos gubernamentales como la policía quedan incompetentes quedando así como crímenes sin sanción alguna.