Empezó a construirse poco después bajo la dirección del arquitecto Ignacio de Cagigal,[1] siendo inaugurado en 1670.
En 1799 se reedificó por completo adquiriendo desde entonces una planta semicircular propia de los teatros modernos.
[2] De nuevo fue renovado el teatro en 1849 ampliando su aforo hasta las 600 localidades.
Sin embargo para la década de los 80, el teatro presentaba un aspecto ruinoso y destartalado.
[2] El Teatro del Fontán cayó en desuso y finalmente fue derribado en 1901, dejando en pie únicamente las fachadas.