Originalmente se levantaba en la cercana calle Jovellanos, en el emplazamiento actualmente ocupado por la biblioteca pública de la ciudad hasta ser destruido durante los combates que tuvieron lugar en la revolución de 1934.
Este se empezó a construir debido a la demanda de una villa en evolución y siguiendo los trazados oportunos del arquitecto Mariano Marín Magallón.
En esta primera época son habituales las zarzuelas, operetas, orquestas sinfónicas, variedades y mascaradas, además de teatro.
[2] Durante la Guerra civil fue incautado por el Control de Espectáculos Públicos de la República, y en él se representaron actos políticos y obras teatrales y espectáculos afines a la causa republicana hasta ser reducido a escombros en 1937 durante un bombardeo.
En la actualidad es uno de los coliseos públicos nacionales con mejores infraestructuras y que ofrece más programación durante los doce meses del año.