Los fabricantes afganos de alfombras, incorporaron los dispositivos de guerra a sus diseños, casi inmediatamente después de que la Unión Soviética entrara en el país.
Los tapetes producidos en respuesta a estos eventos, pueden bien constituir la más rica tradición mundial de arte bélico del siglo XX y el entrante.
Los términos Balochi y tapete de guerra son generalizaciones asignadas al género por los comerciantes de alfombras, galerías mercantiles, coleccionistas y críticos.
En el año 2000, el Gollenstein Verlag de Blieskastel en Alemania, publicó "Lebensbaum un Kaschnikow.
Krieg und Frieden im Spiegel afghanischer Bildteppiche" de Juergen Wasim Frembgen y Hans Werner Mohm.