Taken (película)
Agradecida, Sheerah le propone ayudar a su hija tras enterarse de que quiere ser cantante.Sheerah le proporciona un contacto, asegurándole que correrá con todos los gastos si Kim tiene verdaderamente talento.Más tarde, descubre que el verdadero motivo es seguir a la banda U2 en su gira por varios países europeos.Bryan llama a su hija, ya que ella había olvidado hacerlo.La joven responde en el cuarto de baño, porque Amanda ha puesto la música a todo volumen y no puede oírlo bien.Cuando los secuestradores se disponen a llevársela, Bryan habla brevemente con uno de ellos, Marko (Arben Bajraktaraj), haciéndole saber que posee ciertas habilidades especiales que pueden convertirlo en una pesadilla para él, a menos que liberen a su hija; si lo hacen, no los perseguirá y se olvidará de todo, pero si se la llevan, los encontrará y los matará.Se considera una película de alta recaudación, lo mismo que su secuela Taken 2, la cual la superó en ingresos.[5] Richard Corliss de Time Magazine's comentó: "La película no tiene nada más en su mente que docenas de chicos malos recibiendo una paliza y otro tipo se convirtió al instante en roadkill.Se puede apuntar su atractivo a las frases brillantes, las trampas ingeniosas y herramientas sofisticadas".Aun cuando sean peligrosos ¿Qué hace operando de manera impía en un piso ajeno?