Y es de destacar que el mismo Madoz escribe Tajiche en el artículo dedicado a ese Roque del Ámbar (ibid.
Nos merece mucho respeto Bethencourt Alfonso, pero no nos convence la explicación onomatopéyica que da para este topónimo.
Es llamativa su estructura superior pues tiene tres cráteres de diversos tamaños en su cima.
Este edificio se ha datado por K-Ar en tres puntos, y por su posición estratigráfica relativa respecto a edificios y malpaíses próximos, algunos también datados, parece que puede tener 50 000 años.
Estas coladas forman potentes morrenas de lava con grandes bloques sueltos y caóticos en superficie, si bien, como es habitual en este tipo de coladas, su interior es masivo y coherente, con disyunción columnar.