La capital se trasladó a Andong, Gyeongsang del Norte en febrero de 2016.
Daegu siempre ha tenido una gran importancia por su estratégica situación en la confluencia de los ríos Geumho y Nakdong.
Poco después, se propuso trasladar la capital del reino desde Gyeongju hasta Daegu, pero no llegó a hacerse.
Cuando el rey Wang-geon se encontraba en el campo de batalla (cerca del templo Donghwasa), el general Sing se intercambió su armadura con el rey, atrayendo a los soldados de Hubaekje, quienes lo atraparon.
De esta forma, el verdadero Wang-geon pudo escapar, para más adelante, conseguir unificar los tres reinos, comenzando así la Dinastía Goryeo.
Durante la segunda mitad del siglo XX, la ciudad experimentó un crecimiento explosivo.
Daegu se encuentra en un valle, que está rodeado por montes poco elevados: el monte Palgong (Palgong-san) en el norte, el Biseul (Biseul-san) en el sur, las colinas de Gaya (Gaya-san) al oeste, y una serie de colinas más pequeñas al este.
La zona no recibe demasiadas precipitaciones, salvo en el verano, y registra escasa nubosidad.
La zona recibe poca lluvia excepto durante el verano y es soleada el resto de año.
El budismo tradicional es fuerte, y existen diversos templos de dicha confesión.
La población es, como en el resto de Corea del Sur, sumamente homogénea, con pocos inmigrantes.