En vistas a los muchos fugitivos provenientes del Reino de Israel, cuya capital Samaria había sido tomada en el 722 a. C. por Asiria, Ezequías hizo construir un nuevo muro en torno a la ciudad, que había crecido notablemente en dirección oeste y sur, y aseguró por medio de la construcción del túnel que lleva su nombre el abastecimiento de la ciudad con agua potable (II Crónicas 32, 1-5).El ataque y el asedio de la ciudad fueron llevados adelante por el rey asirio Senaquerib en el año 701 a. C. (II Crónicas 32, 9).[1][2] En la Edad de Hierro II (1000-520 a. C.) se construyeron en Palestina diversas instalaciones complejas para asegurar la provisión de agua potable en ciudades israelitas y judías, como por ejemplo en Megido, Jasor, Tell Be'er Scheva (Beerseba ) y en otros lugares.El túnel aprovecha en dirección oeste la antigua vertiente de los Jebuseos como pozo vertical (al que se lo identifica con el canal a través del cual los israelitas, en tiempos del rey David, ingresaron a la ciudad y la tomaron –II Samuel 5, 8–; de este canal los jebuseos habrían sacado agua, pero siempre dentro del área protegida por las murallas de la ciudad).Dos grupos de trabajadores perforaron la roca, el primero iniciando sus tareas junto a la fuente, el otro comenzando en la desembocadura.Con una lámpara de mano pueden recorrerse los aproximadamente 450 metros del túnel, en el que el agua llega hasta la rodilla.
Inscripción de Siloé
Letrero que dice "Usted está parado en el lugar donde la inscripción del Siloé escrita hace aproximadamente 2700 años durante el reinado de Ezequías, fue encontrada".