Según diferentes descripciones, el Tívoli contaba con amplios jardines en donde la gente hacía días de campo, salones para banquetes, teatro[3] y un restaurante, en donde se presentaban diversos grupos musicales como el de José Rocabruna.
[1] También contó con una afamada pista de patinaje (nombrada en la época como skating ring).
[3] Fue sitio de encuentro común entre la gente adinerada de finales del siglo XIX y principios del XX.
[7] En 1924 su arena de box fue inaugurada con la pelea entre dos boxeadores estadounidenses Wild Cat Ewing contra Kid Rich, el Ciclón de Oklahoma.
[8] Al igual que los circos Atayde u Orrín, y los teatros Principal, Colón y Arbeu, el Tívoli fue uno de los primeros escenarios para la lucha libre mexicana.