El tílburi es un carruaje de dos ruedas y dos asientos, generalmente sin capota.
El sistema de suspensión consta de unas varas que se unen por detrás por un travesaño y con la caja por dos muelles normales a los del eje, unidos entre sí por dos piezas gemelas.
Lleva guardabarros de cuero.
Tiene ruedas de gran diámetro, de modo que la caja parece que va embutida en ellas, y esto, unido al poco peso del carruaje, lo hace poco estable y fácil de volcar.
Fue desarrollado a principios del siglo XIX por la firma londinense "Tilbury".