En la lingüística, la subcategorización denota el estatus categorial de los argumentos que son requeridos o permitidos por una unidad léxica para expresar una proposición.
Los verbos se pueden clasificar dependiendo la cantidad de argumentos, si alguno, que requieren para expresar una proposición.
Estas clasificaciones son: Las siguientes frases demuestran el concepto de la subcategorización: En la primera oración, «trabajar» es un verbo monovalente y, por lo tanto, la subcategorización solamente incluye un argumento - «Juan».
En este caso, el argumento toma la posición del sujeto de la proposición.
La subcategorización contiene tres argumentos - «Marta», «la carta» y «al maestro» - que respectivamente son el sujeto, objeto directo y objeto indirecto de la proposición.