La anémona utiliza este mecanismo para evadir enemigos o permitirle ingerir presas más fácilmente hacia la cavidad gastrovascular.
Los tentáculos son más bien cortos, comparados con los de otros géneros como Heteractis, con la punta redondeada, y coloreados en un tono marrón dorado, amarillo, rojo, rosa, púrpura, gris o verde.
Se alojan en grietas rocosas, dejando tan sólo el disco oral a la vista.
En este caso, se genera una larva plánula ciliada que caerá al fondo marino y desarrollará un disco pedal para convertirse en una nueva anémona.
También es necesario que el acuario receptor tenga, al menos, un año de maduración, y los parámetros del agua impecables.