Wright compareció y fue declarado culpable de los asesinatos siendo condenado a cadena perpetua.
Según la policía, había sido asfixiada y que además, que estaba embarazada de unos tres meses al momento de ser asesinada.
[11] El 20 de diciembre, la policía recibe un permiso para interrogar al segundo detenido por 36 horas más.
El 22 de diciembre, Steven Wright compareció ante los jueces encargados del caso en Ipswich y se ordenó que permanezca en prisión, por seguridad.
El juez ordenó que comenzaría en enero de 2008 mientras Steven Wright se declaraba inocente ante las palabras del magistrado.