A veces se lo confunde con el "tutiá" o "espina colorada" (Solanum sisymbriifolium).
Las hojas y los tallos inferiores están recubiertos por una pelusa suave que le da un aspecto plateado o grisáceo a toda la planta.
Tienen cinco estambres amarillos más o menos reunidos en forma de cono.
Solanum elaeagnifolium fue descrita por Antonio José de Cavanilles y publicado en Icones et Descriptiones Plantarum 3: 22–23, pl.
[2] Solanum: nombre genérico que deriva del vocablo Latino equivalente al Griego στρνχνος (strychnos) para designar el Solanum nigrum (la "Hierba mora") —y probablemente otras especies del género, incluida la berenjena[3]— , ya empleado por Plinio el Viejo en su Historia naturalis (21, 177 y 27, 132) y, antes, por Aulus Cornelius Celsus en De Re Medica (II, 33).