La Sociedad Palentino-Leonesa de Minas fue una compañía minero-siderúrgica española que instaló los primeros altos hornos con coque de España, en Sabero, en 1847, la llamada Ferrería de San Blas.
Ante la falta de capital, en 1845 constituyó una sociedad anónima, la Palentina Leonesa de Minas, en la que participaron Santiago Alonso Cordero y Casiano del Prado.
Aunque las primeras fundiciones eran de mala calidad, para 1859 ya se había logrado obtener hierro forjado de primera.
A ello también se unieron sus buenos contactos con el gobierno, que obligó a la Palentina-Leonesa de Minas a pagar enormes multas y recargos por supuestas defraudaciones en la contribución industrial.
Su empresa heredera fue Hulleras de Sabero y Anexas.