[1] El término «sinopsis» procede del latín «sinopsis», cuyos orígenes se remontan al griego antiguo y que etimológicamente significa visión de conjunto,[2] de las raíces griegas συν (syn, ‘junto’) y οψις (oasis, ‘ver’).
La sinopsis, por lo general, no incluye una visión crítica del tema, sino que tiene como objetivo informar.
Puede utilizarse en trabajos e informes no funcionales, así como en obras de ficción y creaciones multimedia.
No incluye tecnicismos narrativos ni cinematográficos y está escrita en tercera persona con los verbos principales en presente de indicativo como forma verbal dominante.
Y es necesario que recoja el argumento completo detallado, es decir, debe incluir el desenlace, sin aportar ningún tipo de valoración.