[1] El Sancti Spiritus «tiene una bella cúpula en pirámide que lleva en lo alto una hermosa cruz», anotó el peregrino Doménico Laffi en 1670.
La techumbre es a cuatro aguas y se cubre con lajas calizas escamadas, que le confieren un recio aspecto.
Los arcos son de medio punto y descansan en pilares cuadrados con imposta superior.
El Sancti Spiritus hay que considerarlo templo funerario, pero no fue lugar de enterramiento perpetuo en el medievo.
Desde hace tiempo son enterrados en el claustro canónigos y beneficiados de la colegiata; sus nombres figuran en una lista enmarcada en el muro posterior.