[cita requerida] En 1559 volvió a cambiar de nombre, esta vez por propia voluntad, pasando a llamarse Takeda Shingen (Shin es la lectura onyomi del kanji 信 que significa «creer»;[1] 玄 gen significa «negro», el color que en el budismo representa la inteligencia y la verdad).
Los hechos respecto al cambio de liderazgo no están claros, pero se cree que su padre había planeado nombrar como sucesor a su segundo hijo, Takeda Nobushige, en lugar de a Harunobu.
Por su colaboración en el incruento golpe de Estado se formó una alianza entre los Imagawa y los Takeda.
Mientras planeaban atacarle en Fuchu (donde se decía que estaba reuniendo sus tropas con vistas a la batalla) fueron cogidos desprevenidos cuando las fuerzas de los Takeda cayeron de improviso sobre ellos y, aprovechando su desconcierto, les derrotaron rápidamente en la batalla de Sezawa, lo que le aseguró su posición en Kai y le abrió el camino para las incursiones que realizaría en Shinano el mismo año.
Dichas batallas no eran sino escaramuzas controladas en las que ninguno de los enemigos se comprometía plenamente en la lucha.
Hacia esta época, el clan Takeda sufrió dos importantes contratiempos dentro del propio grupo.
Shingen descubrió dos conspiraciones para acabar con su vida, el primero organizado por su primo Katanuma Nobumoto, al que le ordenó cometer seppuku, y el segundo por su propio hijo y heredero Takeda Yoshinobu.
Tras la muerte de Shingen, su hijo Takeda Katsuyori le sucedió como jefe del clan.
Tokugawa aprovechó la oportunidad y derrotó de nuevo al debilitado clan en 1582 en la batalla de Tenmokuzan, tras la cual Katsuyori se suicidó y el clan Takeda no se recuperó jamás.
El clan Takeda fue casi completamente destruido tras la muerte del heredero de Shingen, Katsuyori.
Probablemente no fue más cruel que otros señores de la guerra contemporáneos, pero sí agresivo contra quienes le combatían.
Durante el período Edo, 24 vasallos que sirvieron a sus órdenes se convirtieron en personajes muy populares para ukiyo-e y bunraku.
No todos ellos se conocieron o trabajaron juntos, ya que algunos habían muerto antes de que otros entraran en el clan, pero todos destacaron por los servicios excepcionales al clan Takeda, y a Shingen en particular.
En él Shingen promete que no tiene, ni tiene intenciones de tener, relaciones sexuales con ningún otro vasallo y promete que, "como quiero tener relaciones contigo", no le dañará en modo alguno y pone como testigos a los dioses.