Fue el primer italiano designado para arbitrar la final de la Copa Mundial cuando se hizo cargo en 1978 entre la anfitriona Argentina y Países Bajos.
En 2013, fue incluido en el Salón de la Fama del Fútbol Italiano.
Dos años después, estuvo en acción en el Mundial de Argentina.
Debido a su buena actuación en la segunda ronda, Abraham Klein debió silbar la final entre Argentina y Países Bajos.
[3] El vicepresidente de la FIFA, su compatriota Artemio Franchi lo nominó para la final, mientras que Klein estuvo a cargo del partido por el tercer lugar.