Serendipia

Una serendipia es un descubrimiento que puede llegar a ser bueno o valioso de manera accidental o casual, al momento de estar buscando una cosa diferente a la sucedida.

No se debe confundir con la anticipación o la ciencia ficción, donde se adelantan inventos mucho más genéricos que casi todo el mundo cree que probablemente existirán algún día.

Se llegó a usar en la película The Parent Trap de 1961, para designar a la cabaña ("Serendipity") del campamento de verano donde los dos personajes, Sharon McKendrick y Susan Evers (ambos papeles interpretados por la misma actriz Hayley Mills), fueron confinados en castigo por su bochornosa repulsa mutua, y en la que descubrieron que su asombroso parecido no era mera casualidad, sino que eran hermanas gemelas separadas desde la cuna por el divorcio de sus padres y la total falta de comunicación entre ellos; y donde también urdieron el plan de intercambiar sus personalidades para conocerlos y secretamente estimularlos a una reconciliación.

El concepto y el término fueron rescatados en 1989 por Royston M. Roberts en su libro de divulgación Serendipia.

[4]​[5]​ En este libro, Roberts, propone además el término «pseudoserendipia» para describir las situaciones en las que el investigador, tras haber investigado mucho sobre algo sin obtener resultados, consigue finalmente su objetivo, pero a causa de un accidente o una revelación.

El cometa Shoemaker-Levy 9 se descubrió en 1993 gracias a una serendipia.