Se producen seracs cuando el hielo glaciar se fractura al pasar encima de fuertes desniveles del terreno que le someten a tensiones que no le permiten mantener su elasticidad.
Ocurre también en el caso de glaciares suspendidos, cuando la lengua glaciar alcanza un acantilado.
Los seracs pueden alcanzar grandes dimensiones, y son peligrosos para los montañeros ya que suelen caer sin avisar.
Son un obstáculo muy conocido en muchas de las montañas más altas del mundo, en particular, en el Kanchenjunga.
En Suiza las caídas de seracs entre 1914 y 1983 han ocasionado 124 víctimas.