La seguridad lógica se refiere a la protección de los datos, procesos y programas, así como al acceso ordenado y autorizado de los usuarios a la información.
Se emplean diferentes medios y medidas para lograr esta seguridad, como el uso de claves, cifrado, firma digital, certificados digitales y sistemas de archivos encriptados[1].
El objetivo principal de la seguridad lógica es restringir el acceso a los programas y archivos, asegurando que se utilicen los datos, archivos y programas correctos según los procedimientos establecidos.
La seguridad lógica también se enfoca en la protección de los datos almacenados y transmitidos a través del sistema de información.
Para lograr los objetivos de la seguridad lógica, se establecen diferentes medidas y procesos.