Además, contaban el respaldo de soldados mercenarios y militares cubanos y de la Alemania Oriental.
Realizaron un ataque con armas ligeras, artillería, morteros y lanzamisiles sobre Kolwezi, ciudad minera de 100.000 habitantes con infraestructuras de transporte, y tomaron unos 2.200 rehenes entre la población occidental y 3.000 entre la africana.
[4] Mobutu Sese Seko ordenó la militarización de la frontera con Angola y el desalojo a los civiles que vivían en ella.
y Cuba convencieron a Zaire y Angola respectivamente de acordar un pacto de paz.
Zaire cortó temporalmente su apoyo a los grupos angoleños rebeldes y Angola hizo lo mismo al negar el apoyo a los rebeldes separatistas del FLNC.